By Valentín Faguagua
Las herramientas para mantenerme en la nueva normalidad. Estos objetos son a los que he recurrido y recurro varias veces a la semana para de alguna forma afrontar esta realidad que nos asaltó, pero que aun así nos obliga a amoldarnos para continuar nuestra vida.
1. Banana, porque la fruta ahora forma mas parte que nunca de la rutina, reemplazando otro tipo de snacks.
2. Batidor manual, porque con la cuarentena he dedicado tiempo a mi hobby de la cocina.
3. Desinfectante hospitalario, indispensable para lavar compras, zapatos o todo aquello que llevamos al exterior.
4. Libro “El libro de los Espíritus”, en este tiempo concluí con un cambio de creencias, y esta bibliografía es la cabecera teórica de mi nueva creencia.
5. Computadora personal, a pesar de ser un objeto utilizado cotidianamente, en estos meses se ha convertido en un nexo entre mis clases y yo, sin dejar de lado que también es empleada como centro de entretenimiento.
6. Almohadón, simboliza la búsqueda de nuevas posturas o nuevas formas de transcurrir la jornada de estudio.
7. Horno para esencia, utilizado para potenciar la practica de meditación, muy necesaria en días pesados.
8. Smartphone, gracias al COVID este año no he visto a ciertas amistades, así que el teléfono se ha convertido en un gran aliado para mantener nuestra relación fluida.
9. Jarro térmico, tanto el café como el te, se han convertido en un placer nuevo y de alguna forma ayuda a crear momentos de tran- quilidad.
10. Lentes, se hicieron indispensables, producto de las largas jornadas lectivas frente a la computadora.
11. Alcohol en gel, presente en la mochila siempre que salgo a realizar compras o caminatas.
12. Pulsera inteligente, mientras que antes de la pandemia la utilizada para saber si llegaba a horario, actualmente la utilizo para armar rutinas.
13. Auriculares, los utilizo para crearme momentos de privacidad e intimidad.
14. Medias, el pasar tanto tiempo sin calzado me ha hecho recurrir a este tipo de prenda para estar mas cómodo en mi casa.
15. Barbijo, es algo así como la garantía para poder ingresar a algún lugar y que no te miren extraño.